EDITORIAL: ACÁ NADIE SOPLA LA «PLUMITA»…

…La plaza Mayor estaba atestada de gente, a los ingresos laterales del reino no le cabía un «alfiler». Cientos de miles gritando al unísono «La vida por Nerón», «La vida por Nerón»…Así durante varias horas, hasta que el emperador salió al balcón del Palacio Central y mirando hacia el horizonte gritó «Ya que todos dicen dar la VIDA por mi, ha llegado el tiempo de comprobarlo», su voz hizo enmudecer a la multitud «Yo voy a tirar ésta plumita al aire y a quien se le pose en su cabeza, ese, ¡ese!, entregará su vida por mi…». La explosión de júbilo y pasión por su lider se contagiaba y un solo grito tronaba, siendo escuchado a varios kilómetros a la redonda…»La Vida por Nerón»… Pero cuando la Plumita comenzó a caer, por efecto del viento, acallaba a quienes veían que se les acercaba la «hora» y la «plumita». Lentamente fueron cambiando los semblantes y cuando ya la tenían casi encima, esos…, que daban «la vida» empezaron a SOPLAR fuerte para que dicha plumita cayera en la cabeza de otro…
Sirve para el fútbol, sirve para la vida misma…
Hoy el equipo de fútbol de CAMIONEROS entrenó y en la previa, hubo una charla con el cuerpo técnico, desgranaron los cinco partidos jugados, donde lejos estuvieron de ser «pasados por arriba» y con muchas chances de ganar al menos dos o tres de los cinco disputados. Saben bien y son concientes que la cosecha es magra teniendo en cuenta sus propias expectativas, pero son ellos mismos quienes deben dar respuestas, dentro de la cancha, porque condiciones y preparación les sobran y herramientas para lograrlas también. En cada vuelta o en cada reducido en triángulos, cuadados o pentágonos, en la cancha dos. O en la principal con la tarea programada de los arqueros, nadie, salvo el mismo grupo y su atocrítica, tiene tiempo para el reproche o la queja. «De ésta salimos todos juntos» es la constante con cada uno con los que compartimos la práctica, y evidentemente los resultados finales del proceso serán evaluados por el presidente del club y su entorno. Casi un tercio del campeonato han mostrado paridad en los trámites, dificultades a la hora de cerrar los partidos, definiciones erróneas en jugadas claras, volúmen de juego escaso en varios pasajes, poco peso específico a la hora de decodificar adentro de la cancha las variables a utilizar. ¿Es una quimera o una utopía llegar a lograrlo?, no, para nada. Hubo, también jugadas polémicas que ante la duda, se cobraron en contra. Algunos lesionados que hicieron variar lo pensado y una expulsión que seguramente no ayudo y condicionó aún más para el partido siguiente. Ellos, más que nadie, lo saben. Ahora restan 33 puntos en disputa y el márgen comienza a achicarse, pero éste grupo de 40 tiene un valor agregado muy grande, todos compiten para sacar del pantano al Camión. A nadie se le ocurre «Soplar la Plumita», todos dan todo x todos y cada uno en su lugar, porque si sucediera lo contrario, tanto esfuerzo y tanto sacrificio compartido iría a parar «al pasto», esa es la Ley Primera como dicta el Martín Fierro de José Hernández…